Hoy en día puedes encontrar en los anaqueles prebióticos y probióticos en tantas formas diferentes que no podemos darnos el lujo de no saber para qué sirve cada uno. Si eres de los que aún se revuelve con los conceptos de probiótico y prebiótico. ¡Este blog es definitivamente para ti!
Prebióticos vs Probióticos
Todos en algún momento hemos escuchado sobre los probióticos, los cuales son bacterias buenas que viven en nuestro intestino y que nos protegen contra diferentes enfermedades estomacales e incluso contra enfermedades del sistema inmune. Son tan importantes que hay más de 400 cepas distintas en nuestro cuerpo y, en total representan ¡Más de un kilo de nuestro peso!
Tener una buena flora microbiana en nuestro intestino es fundamental y por eso, la ciencia y la tecnología han descubierto que hay algunas fibras que no son digeribles por los humanos pero que al consumirlos, estimulan el crecimiento y la actividad de las bacterias buenas, a estos ingredientes de la dieta se les denominó prebióticos.
Debido a la relación anterior, hay muchos productos que mezclan probióticos y prebióticos para suplementar el contenido de bacterias y a la par estimularlas para que crezcan y actúen en favor de nuestra salud.
Beneficios de consumir prebióticos
Además de los que ya se mencionaron, en la revista Nutrición Hospitalaria de España se publicó un artículo que menciona que el consumo de estos alimentos ayuda a mejorar el tránsito intestinal, reduce el estreñimiento y previene enfermedades intestinales como colitis ulcerosa, síndrome de intestino irritable, entre otros.
Por otro lado, el agregar prebióticos a tu dieta aumenta los niveles de saciedad y ayuda a controlar los picos de glucosa que se dan después de la comida.
¿Qué alimentos son conocidos como prebióticos?
En general, se considera que todos los prebióticos son fibras, pero no todas las fibras son denominadas prebiótico. Algunos ejemplos son los siguientes:
Autor: Nerissa Álvarez
Revisión por: Betzabe Guido
Referencias:
Corzo, N., Alonso, J. L., Azpiroz, F., Calvo, M. A., Cirici, M., Leis, R., … & Rúperez, P. (2015). Prebióticos; concepto, propiedades y efectos beneficiosos. Nutrición Hospitalaria, 31(1), 99-118.
De las Cagigas Reig, A. L., & Anesto, J. B. (2002). Prebióticos y probióticos, una relación beneficiosa. Revista Cubana Aliment Nutr, 16(1), 63-8.
Jerkunica, E. (2020). 21 Amazing Facts About Probiotics. Probiotics.org
Kellow, N., Coughlan, M., & Reid, C. (2014). Metabolic benefits of dietary prebiotics in human subjects: A systematic review of randomised controlled trials. British Journal of Nutrition, 111(7), 1147-1161. doi:10.1017/S0007114513003607
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