De acuerdo a la Ley General de Salud, los suplementos alimenticios son aquellos productos a base de hierbas, extractos vegetales, alimentos tradicionales, deshidratados o concentrados de frutas, adicionados o no, de vitaminas o minerales, que se pueden presentar en forma farmacéutica y cuya finalidad de uso sea incrementar la ingesta dietética total, complementarla o suplir algún componente.

Es importante saber que un suplemento alimenticio no sirve para obtener nutrientes que se deben consumir en la dieta, puesto que están diseñados para complementarla. La funcionalidad de un suplemento alimenticio se basa en el aporte de proteínas, grasas, carbohidratos, vitaminas o minerales.

Los suplementos están destinados a un sinfín de categorías, las cuales ayudan a complementar y proveer ciertos nutrientes que con el paso del tiempo tu cuerpo produce en una menor cantidad, o que debido a tu dieta, no logras obtenerlos ni sintetizarlos en tu cuerpo naturalmente.

Algunas de las categorías como belleza y sistema digestivo tienen ingredientes muy específicos y conocidos por la gente. Por ejemplo, el colágeno es considerado como el ingrediente número uno en la categoría de belleza, sin embargo, cuando hablamos del sistema digestivo, los probióticos y prebióticos se consideran como los ingredientes líderes en la categoría.

Cada ingrediente tiene su función específica en la formulación, y a lo largo de este blog se darán a conocer las funciones individuales de algunos ingredientes específicos que se encuentran comúnmente en los anaqueles.

 Debido a que existe una variación entre los productos de las mismas categorías, se recomienda escoger el que mayor se ajuste a las necesidades diarias del cuerpo y el que mejor complemente la dieta.

Referencias:
Mercado Suplementos en Mercado Mexicano – Euromonitor 2019